miércoles, 25 de junio de 2008

VIVIR A TU LADO AMOR...



Mi cabeza gira en un remolino de confusiones entre lo que fue, lo que pudo ser, lo que es y lo que será. A veces el pasado llega sin avisar, sacude mi mente con sus recuerdos, con las promesas que no fueron y con los besos que se esfumaron de mis labios para nunca más volver. A veces sin aviso llega la nostalgia, toca la puerta, me sonríe, me acaricia en un verso perpetuo que se levanta como una cometa entre mis mejillas y mis cabellos. Hay otras veces, que aunque son veces, no son tantas. Son momentos, momentos que aprendí a compartir cada noche contigo, momentos que extraño, que he aprendido a desear mientras mis ojos se consumen en las lágrimas del desespero. Instantes como ahora, en los que recuerdo tu voz peculiar, esa misma que entre “tu me burlas” nos causa tanta gracia. Pequeños momentos de tiempo que pasan con el sonido de tu risa, con tu mirada apasionada, con los cabellos negros ensortijados y con el aroma del café colombiano, que aunque no es el que ahora bebes, llegará el día en que lo serviré sobre tu mesa como la pequeñez prometida y como el principio de nuestro matrimonio descalzos sobre la arena del mar. Un día, no muy rosa no muy gris, un día simple como cualquiera, como hoy o mañana, un día en que aprenderás a tomar los líquidos fermentados que se desprenden de la cebada, mientras entre imitaciones ocultas beberé mis primeras copas de vodka en tu honor. En honor a la persona a quien quiero, como tributo a tus palabras, a la familia con la que sueño pertenecer, a la suegra a quien espero visitar cada tarde en los campos de tus tierras, a esos ruidos de tu cocina que logran cautivarme y que me hacen sentir tan cercano a casa, tan cerca de la tranquilidad, tan próximo a ese paraíso que está a unos metros de la seguridad de tus brazos. No sé que pasa por tu mente ahora, pero en mi cabeza no deja de replicar las iniciales de tu madre, los ruidos de tu cocina, el sonido peculiar de tu voz, el eco de tu hermana en mi mentón, tus sobrinos y “los padrinos mágicos” en mi desazón, el aroma del café y los profundos versos que nos hemos dedicado en este trayecto en el que un cupido decidió flechar mi corazón con el ángel de tu interior, y la complejidad cristalina que trasluce tu exterior… Quiero vivir, pero quiero vivir a tu lado, dormir en tus brazos, que descanses en mi pecho, y que corras sobre mis hombros, si es así quiero vivir, quiero vivir a tu lado amor…

3 comentarios:

Sir. Killian dijo...

Mmmmm yo también quiero estar con alguien, mejor dicho con una floresita.

bueno ojala se nos de rápido.

Pdta: muy buen post, y que termines rápido esa tesis que te tiene ocupado.

saludes.

Roy Jiménez Oreamuno dijo...

Esto es una oda al amor, que profundo, es extenso y con hilo conductor muy precisa.

Hasta la suegra salió a relucir, es un amor a la familia, a todo un entorno familiar, que va a complementar un amor intenso.
Muy bello.
Saludos

Fausti dijo...

DIIOSS!!!! Me matas, me matas!!!

Que declaración tan hermosa y sentida. Definitivamente no la dejes ir. Buscala hasta el fin del mundo y perpetua ese sentimiento tan puro y hermoso.